¿Qué es el estilo de vida sostenible?

El estilo de vida sostenible es aquel que práctica reducir la demanda de recursos naturales asegurándose de reemplazar lo que usas lo mejor que puedas. Volverse más ecológico puede ser de gran ayuda para reducir el impacto ambiental y hacer de este planeta un lugar limpio y seguro.
¿Es posible llevar un estilo de vida sostenible?
Para muchas personas llevar un nivel de vida sostenible parece imposible, ya que piensan que es muy complicado, costoso y en algunos casos pierden calidad de vida.
Nada más lejos de la realidad, solo tienes que ver los hábitos necesarios para llevar una vida sostenible a continuación.
10 hábitos imprescindibles para llevar una vida sostenible
1. Una vida que reduce el uso de los recursos.
Un estilo de vida sostenible fomenta cuidar el agua, disminuir el uso de energía, dejar a un lado los recursos que provienen de fuentes no renovables y cambiarlos por recursos naturales. Contrata energías renovables y o instala paneles solares, recolecta agua de lluvia y aprovecha cada gota.

2. Hogar sin químicos.
Significa vivir en un hogar libre de químicos, puedes empezar por aprender a fabricar tus propios productos de limpieza, cosmética, jardinería… De este modo no solo ayudamos al planeta si no también la salud de toda la familia.
3. Vivir siempre con ahorros.
Cuando tienes una consciencia sostenible y cambias la manera de comprar, tus hábitos, reduces de tu vida unas cuantas cosas innecesarias, reutilizas todo lo que puedes y reparas lo que se daña. Comenzaras a ver crecer tus ahorros. ¡Créeme muchas veces te sorprendería el resultado!
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4. Simplificas la vida.
Cuando practicas un estilo de vida sostenible comienzas a preguntarte que es lo que necesitas sobra de tu vida. Por lo tanto comienzas a simplificar y aprendes a vivir tan solo con lo que necesitas. Cuando tu vida se hace más sencilla, compras menos porque ya no necesitas ni quieres tantas cosas. Por lo tanto terminas gastando menos dinero lo que te lleva al punto de arriba.

5. Reducir los desperdicios.
Cuando llevas un estilo de vida sostenible compras de manera responsable, productos con menos embalaje o libres de estos, compras productos de mejor calidad que duren mucho más. Aprovechas los cartones, bolsas, o cualquier empaque reutilizandolo o como última instancia enviándolo a reciclar. No hay restos de comida en tu cocina, bien sea porque los aprovechas al máximo o porque tienes una pila de compost.
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6. Tus habilidades, conocimientos, ingenio e instinto aumentan.
Cuando llevas un estilo de vida sostenible, comienzas a investigar a buscar alternativas que te lleven a una vida más natural, se despierta el interés por cocinar de manera más saludable y respetuosa con el medioambiente, tu curiosidad por encontrar tutoriales y mejorar tus conocimientos para reparar algún artículo que se haya descompuesto. Tu creatividad aumenta cuando le das nueva vida a un artículo que parecía obsoleto o que ya cumplió su función. Tu vida va siendo cada vez más natural y amigable con el medioambiente.

7. Caminas, andas en bicicleta o transporte público.
Reducir la huella de carbono con los medios de transporte es una de las más fáciles, cuando hablamos de llevar una vida más sostenible. Solo se trata de tomar el coche en casos extremadamente necesarios, otra opción es la de compartir el coche. Caminar y andar en bici no solo son mejores para el ambiente, también lo son para la salud.

8. Aprovechas la luz del día.
En un hogar sostenible provechas mejor la luz solar durante el día, de este modo reduces la dependencia de los combustibles fósiles para producir electricidad y además aumentas la vida útil de las bombillas. También están presentes las luces led de bajo consumo.

9. Plástico cero, el pilar de un estilo de vida sostenible.
En una casa que lleva una vida sostenible el plástico es muy difícil de encontrar. Cuando está presente es porque no existe una alternativa y en ese caso se reutiliza o recicla.

10. Cultivar tu propio alimento.
Una pequeña huerta garantiza una alimentación saludable, reduce la huella y las facturas de alimentos, además de la gran satisfacción que se siente el recolectar los frutos y verduras que sustentaran a la familia.

Si te sientes identificado con este artículo vas por buen camino, llevas un estilo de vida sostenible!